Seal acusa a Oprah Winfrey de encubrir los abusos sexuales de Harvey Weinstein
El cantante no es fan de la primera dama de la autoayuda en Estados Unidos
Las guerras culturales están en un punto alto en las industrias del entretenimiento y en Hollywood los debates de feminismo, acoso sexual, diversidad y ataques a Donald Trump parecen indicar que contar historias memorables es lo de menos. Como se vio en los recientes Globos de Oro, los actores y las personalidades de la industria nunca pierden el tiempo al tomar una plataforma y hacerla suya con sus opiniones, sin importar si sus argumentos son sólidos.
En la entrega de los Globos varios actores y actrices protestaron por los acosos sexuales de gente como Harvey Weinstein. Oprah Winfrey, gurú de la autoayuda de millones de amas de casa en la Unión Americana, lanzó un discurso luego de ser reconocida por su carrera. La actriz, productora y escritora hizo un llamado para el cambio en la industria, sin embargo, varios han señalado que sólo hace unos meses Oprah y Weinstein salían fotografiados juntos con grandes sonrisas. Por supuesto, no todos podían saber lo que el productor hacía a puertas cerradas, pero otros consideran que lo hermético del círculo social de Hollywood hace inevitable que los rumores corran. Quentin Tarantino admitió saber lo que Weinstein ejecutaba y no haber actuado al respecto.
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Ahora Seal, el músico británico de origen nigeriano, ganador de cuatro premios Grammy, ha acusado a Oprah Winfrey de hipócrita y de encubrir la historia de abusos sexuales de Harvey Weinstein. En una publicación de Instagram, el compositor publicó un meme donde se ve a Oprah besando a Harvey Weinstein en la mejilla. El texto dice:
Cuando has sido parte del problema durante décadas, pero de repente todos piensan que eres la solución.
Oh, lo olvidé, es verdad, oíste rumores pero no tenías idea que él estaba asaltando serialmente a jóvenes actrices que no sabían en qué se metían. Mi error.
El movimiento #MeToo fue criticado por Catherine Deneuve y otras actrices francesas por haber desatado un pánico moral que ha causado hostilidad entre hombres y mujeres. Varias áreas laborales en Estados Unidos han visto como los empleados hombres empiezan a evitar estar a solas con mujeres por temor a recibir una denuncia por una mirada o comentario fuera de lugar. Mientras Weinstein se mantiene exiliado en Suecia (donde fue golpeado por un hombre en un restaurante), las acusaciones (sin evidencias concretas en varios casos) aumentan contra varios actores y cineastas.
La situación encapsula bien las serias contradicciones de una industria que se debate entre ser un bastión de humanidad y un tugurio de perdición. Solo el tiempo dirá si el Hollywood liberal logra reflexionar seriamente sobre sí mismo y deja las pantomimas mediáticas por un rato.
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