En Enemigo de Todos, Chris Pine y Ben Foster son dos hermanos con una hipoteca que pagar. Con el fin de poder saldar una deuda que los dejaría en la calle, deciden asaltar el mismo banco que le esta cobrando el dinero. Su juego es atacar a los establecimientos temprano en el día, cuando no hay clientes alrededor y luego entierran el vehículo para darse a la fuga después. Pine hace de Toby, el hermano más joven, un buen-mal tipo con buen corazón e instintos de sobreprotección. Foster personifica a Tanner, el más volátil de los dos y el más estúpido también. En el otro caso, están los “buenos” dos policías estatales, Marcus y Alberto, interpretados por Jeff Bridges y Gil Birmingham, respectivamente. Marcus es amable y sabio, con poco filtro en su boca, siempre esta lanzando un comentario cargado de ironía a su fiel compañero, un claro descendiente del sheriff Bell (Tommy Lee Jones) en “No country For Old Men”. Es un deleite ver sus expresiones faciales cada vez que lanza un insulto a su manera. En cierto modo, su relación con su compañero es muy parecida a la de Tanner y Toby, con el mismo sentido de la lealtad y la responsabilidad. Enemigo de Todos es probablemente el mejor papel en la joven carrera de Pine. Ben Foster añade algunos matices finos y poderosos a un personaje que podría haber sido interpretado como nada más que un simple vaquero. Hay un guiño de la humanidad de Tanner aquí en ocasiones superficies, cuando Tanner trata comportarse como un ser humano, pero nunca puede realmente llega allí. Es un personaje creíble cuyo sentido del deber familiar orienta gran parte de lo que se desarrolla aquí.
Comentarios
Facebook
Tomatazos
Mejores
Nuevos