Un hombre que quiere saber más sobre el pasado de sus padres fallecidos hace un viaje gastronómico a Singapur, donde descubrirá algo más que comidas deliciosas.
El suave drama de Khoo puede ser demasiado ligero y sentimental para algunos gustos, pero se maneja con una sinceridad que podría recomendarlo tanto a los románticos incurables como a los gastrónomos insaciables.
Una sorprendente y entrañable alegoría sobre la memoria, el perdón y el talento servida en forma de comedia gastronómica. Ramen Teh hace por los fideos más que lo que Whiplash hizo por las baquetas.
Se salva por su tema subyacente del perdón y la reconciliación entre miembros de la familia que llevan mucho tiempo alejados, para quienes la cruel memoria de la invasión y ocupación japonesa de Singapur durante la Segunda Guerra Mundial aún está viva.
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