Geoffrey Roy Rush es un actor australiano. Protagonizó Shine (1996), de Scott Hicks, donde interpretó al pianista David Helfgott, por la que ganó el Óscar al mejor actor, convirtiéndose así en el primer australiano en conseguirlo. En 1998 participó en la película Shakespeare enamorado, ganadora del Óscar a la mejor película, donde interpretó a Philip Henslowe, propietario del teatro en el que se interpretaban las obras que escribía William Shakespeare, y que le valió una nueva nominación al Óscar. En 2000 recibía su segunda nominación como mejor actor en los Óscar por su interpretación del Marqués de Sade en la película Quills. En 2010 trabajó con Colin Firth y Helena Bonham Carter, en la película de Tom Hooper, El discurso del rey, que se centra en la historia del rey Jorge VI del Reino Unido (Firth) y su tartamudez, que le hace buscar la ayuda de un terapeuta de trastornos del habla, Lionel Logue, interpretado por Rush. Por este papel consigue su cuarta nominación al Óscar.